martes, 29 de octubre de 2013

"Lo que hice por amor" de Susan Elizabeth Phillips

Georgie York, protagonista de la telecomedia más popular del momento, ha sido abandonada -públicamente- por su famoso marido. Pero eso no es todo; su carrera como actriz está cayendo en picado, su padre la saca de quicio y su imagen pública se deteriora por momentos.
¿Qué debería hacer una actriz en mala racha? Desde luego, no ir a Las Vegas, para tropezar con su atractivo pero detestable ex coprotagonista, Bramwell Shepard. Antes de que se dé cuenta, Georgie se encuentra con que tiene un marido tan falso como (quizás) su vida sexual...
Bram, el protagonista masculino de esta ficción, está realizando la interpretación de su vida. Como nunca se ha preocupado de nadie salvo de sí mismo, no está nada claro por qué le sigue el juego a Georgie.
Dos enemigos se encuentran trabajando juntos, y sin guión, en una ciudad en la que los focos iluminan sin piedad y las emociones más intensas a menudo se esconden tras disfraces sorprendentes.


Es una de las novelas de SEP que más me ha gustado. Como todo lo que he leído de ella hasta el momento, me ha enganchado desde a primera página y me lo he leído, a pesar de la falta de tiempo, en apenas dos días.
Me ha parecido una historia estupenda y como siempre original por esos toques absurdos con que adereza sus historias, que son su sello y hacen que sus novelas sean tan refrescantes y divertidas.
Me ha encantado la forma en que Georgie va evolucionando, como va dejando de ser una niña asustada y pasa a tomar las riendas de su vida: madurando. Me he enamorada de Bram desde el principio. En cuanto aparece en escena no me quedaron dudas de que iba a darme más de una sorpresa, uno porque los protas de SEP nunca son lo que parecen y dos porque un protagonista, a pesar de tener defectos, nunca podría ser realmente malo. Ha sido emocionante ir descubriendo al auténtico Bram.
Es una novela a la que no le falta nada, tiene momentos divertidos, romántico, calientes, duros y dolorosos que en conjunto forman una historia preciosa y estupenda.
Tiene un final un tanto almibarado pero nada que no se deje leer.
Como de costumbre no podían faltar las historias paralelas a las que ya nos tiene acostumbras y que dan un punto tierno a la historia.
Pensándolo bien, todas las novelas de esta autora siguen un esquema y sus protagonistas están cortados prácticamente por el mismo patrón una y otra vez, pero así y todo y a pesar de ello sus historias me apasionan y las disfruto como su fuera la primera vez que uno de sus libros cae en mis manos.
Una novela cien por cien recomendable.

jueves, 24 de octubre de 2013

"LUGARES QUE NOS HABITAN" de Marta María López



“Lugares que nos habitan” de Marta María López

Los relatos que componen “lugares que nos habitan” tienen en común, como el propio título indica, la extrañeza que los espacios imprimen en quienes los habitan. Los personajes (familias, parejas) deben enfrentarse a esos lugares y salir reforzados o destruidos de la experiencia que supone habitarlos. Los lugares en sí son metafóricos, representan el miedo a lo nuevo y desconocido, el aislamiento, la imposibilidad de comunicarse con otros seres humanos, la pérdida de la propia identidad y las múltiples personas distintas que podemos llegar a ser dependiendo de las circunstancia. Habitar esos lugares supone un reto que tiene como única recompensa que los personajes se conozcan mejor a sí mismos y a los que conviven con ellos, sin que haya ninguna garantía de que esto pueda ser beneficioso o perjudicial para sus vidas.

Había pensado hacer un pequeño comentario de cada minirelato aunque finalmente he desistido porque creo que aunque son diferentes historias, sin relación unas con las otras, todos tienen ese trasfondo común, ese hilo conductor que los ha agrupado entre las tapas de este estupendo libro.
Según la autora, son historias raras, fantásticas… en un primer momento pueden tenerse la sensación de que efectivamente son historias raras, a medida que vas leyendo esa definición desaparece quedando únicamente la de fantásticas y por más de una razón.
Con una narrativa impecable, Marta María logra introducirnos, de mano de sus personajes, en esos lugares a los que sólo el miedo, las dudas… la debilidad de la mente, nos permitiría el acceso. Como señala la sinopsis, el temor a la soledad, al aislamiento, la falta de comunicación, la ausencia de intimidad… son en realidad los protagonistas de esta obra. Unos protagonistas que poco a poco se han ido filtrando en la mente de los personajes para empujarlos irremediablemente hacia esos lugares que tanto temen.
Nueve relatos, nueve pequeñas historias tan bien contadas que en apenas unas páginas logras visualizar los paisajes, las habitaciones…el entorno en el que transcurren las historias; la autora ha conseguido, con unas frases, que te encariñes con los personajes y que todo parezca muy real a pesar de lo “irreal” de las situaciones.
Me ha fascinado la soltura y la fluidez con que están escritos, lo cuidado de la composición, las expresiones y sobre todo me han enamorado la manera en que Marta María describe sonidos, ruidos, lamentos y sensaciones a lo largo de toda la obra, la ha hecho de una manera tan original, acertada y en algunos casos escalofriantemente gráfica, que no puedo dejar de comentarlo.
            “Estaba quedándose dormido cuando oyó aquel llanto leve de gato recién nacido al que ahogan en un pozo”
Un libro estupendo que recomiendo a todos aquellos que por unos instantes quieran evadirse de la realidad y perderse en lo ilógico…